JULIA PESCE #BOLDWOMAN #TODOPODEROSA
¿Quién es Julia Pesce?
Yo soy una cordobesa que estudió cine; me dedico a hacer películas. Tengo múltiples facetas. Esto es un resumen de quién soy, digamos. No se bien qué define lo que uno es: si es lo que uno hace, piensa o dice… Pero soy una mujer Argentina. El ser mamá define mucho quién soy.
¿Qué te motiva a levantarte todos los días?
Bueno, MMM. La vida en sí, me parece. La magia, el arte, mi HIJO y el amor… me motivan a hacer cosas. Sobre todo, hacer cosas, conocer lugares, gente, habitar el lugar donde estoy, profundizar en lo que hago. Compartir. Todo eso me motiva a seguir, a disfrutar y a levantarme.
¿Por qué el cine?
El cine aglutina para mí muchas disciplinas que me interesan: la escritura, la fotografía, la música, el teatro, una de las ramas más completas donde podés indagar al máximo. Es un buen combo. Desde muy chica me han interesado, vengo de una familia donde se hacía y se consumía arte. Estaba al alcance de mi mano. No podía escoger una carrera que no estuviera relacionada a las artes, estaba muy involucrada en mi vida.
Hace poco vimos tu película “Nosotras Ellas” (Es una especie de película-documental sobre tu familia) ¿Qué buscabas sanar haciendo esta película?
En realidad no lo encaré como una búsqueda de terapia o para sanar algo. Era algo que en un momento de mi vida se volvió fuente de conflicto, de preguntarme cosas, pensar en la relación entre nosotras. A veces me molestaban ciertas reacciones, presiones, si bien parece que todas son muy libres, muchas veces hay opresiones muy chiquitas que están ahí del deber ser, deber responder, que son quizá… Nadie me obligaba a responder en la universidad o a ser exitosa, pero son otras presiones sutiles. Mi familia esta conformada por un grupo de mujeres muy fuerte, que digamos, llevan las riendas de los vínculos. Es un grupo muy cerrado. No dejaban entrar a otras mujeres ni a los hombres. Era muy problemático para mí, si bien yo lo disfrutaba un montón, también sentía que había mucho que no me gustaba. No era algo positivo tanta falta de hombres, no era sano. Esa energía, esa presencia, esa unidad. Esta película nace de ese interés por indagar ese mundo, distinto al que ocupaba yo. Con la cámara uno se permite cierta distancia para poder observar y no estar tan involucrada. Sí, eso fue.
*Trailer: Nosotras Ellas
Viviste y te criaste en un matriarcado. ¿Cómo fue la presencia masculina en tu vida?
Bueno, mi papá fue una figura muy presente en mi vida. No fue ausente ni problemática. Tengo una buena relación con él, compartimos mucho… Pero es muy particular, porque el núcleo duro de mi familia materna son mujeres, y las figuras masculinas fueron desplazadas. Tiene que ver con el vínculo que generan ellas. Ellos también fueron responsables de la distancia, al no saber manejar la situación e integrarse. Es como una “culpa”, responsabilidad mutua. No considero que sea óptimo crecer en un matriarcado o en un patriarcado, el equilibrio es necesario. En el caso de mi familia la presencia femenina es llamativa. Tuvo que ver con las circunstancias de la vida. Vivieron por fuera de Argentina, entonces cuando estaban juntas hacía que el tiempo juntas fuera intenso. Luego estamos muchos meses sin vernos.
¿Qué es lo mejor de estar entre mujeres, en ese clan?
Yo creo que hay mucha confianza. Siento que con ellas puedo hablar de cualquier cosa… Lo que sea. Eso es raro de hallar en los miembros de la familia. Quizá con el grupo de amigas es más fácil compartir intimidad e inquietudes y con la familia más difícil, en la mayoría de los casos; en el mío siento que todo lo puedo compartir. Son abiertas y respetuosas. Creo que la confianza y el amor, ese vínculo fraterno, digamos, es muy bonito. Y hay cosas de género que ya existen, así uno diga que lo femenino, la mirada femenina es un invento… Para mí sí existen ciertas cosas que son de las mujeres. Son campos de juego distintos (en relación con los hombres); percepción, sensación. Creo que hay una forma (no digo global, homogénea), pero sí hay una forma femenina de ver las cosas. Hay matices, y esto no debe ser totalizador. Hay una sensibilidad que creo que compartimos las mujeres.
¿Cómo ves a las mujeres en el cine?
El cine es una industria que se maneja en su mayoría por hombres. En muchas ramas de la vida humana hay mayoría de hombres en puestos de poder, jerárquicos. Que hoy por hoy, las mujeres tenemos ganados muchos más espacios: sí, pero no estamos al mismo nivel. En el caso del cine en mi país hay muchas mujeres que hacen y producen cine. Tienen espacios, quizá no en los espacios más mainstream, pero sí en los alternativos. Creo que las mujeres tenemos más chances aquí que en los espacios más comerciales. Igual, es responsabilidad de cada una abrirse sus espacios. No esperar a que te los den o que te los abran, sino que toca ir a buscarlos o hacerlos. Quizá cueste un poco más, pero hay que insistir y luchar.
¿Has sentido alguna discriminación en tu industria por ser mujer?
No. No. O quizá no he sido consciente. A veces es curioso en las conversaciones después de la película —no es discriminación— es como su imposibilidad de identificarse; les cuesta mucho correrse del papel protagónico. Si no están ellos representados, les suena raro, forzado, valorable. Es como si su exclusión fuera motivo de crítica. Hay muchas películas donde solo hay protagonistas hombres, pero en el caso de mí película, que son todas mujeres, genera mucho ruido la ausencia de hombres.
¿Cómo navegas la aventura del ser mamá?
Bueno, es eso, una aventura. Lo impresionante que es dar vida, sostenerla y criar a una persona. Es muy fuerte el vínculo que se genera con un hijo. Cuando yo veía a mi hermana con su hijo, entendía el vínculo intelectual, pero no físicamente. Y luego cuando me paso a mí, cuando nació, no sentía el vínculo tan fuerte, pero a medida que pasa el tiempo no podría pensar mi vida sin Fermín. Eso define mucho. Yo no creo que una deba vivir para su bebé, pero esta es una etapa para estar con él. Ya luego será él sólo. Mi vida va digitada a su ritmo. No significa no trabajar, significa poder hacer cosas en paralelo. Para mí lo más importante es la vida, en ese sentido, mi carrera o aspiraciones profesionales pasan a un segundo plano. Y no tengo conflicto con eso. También sé que cuando esté dispuesta y preparada lo puedo retomar. Ser madre es un mundo nuevo que se abre, descifrar cosas que no sabías y un amor que no se puede explicar. Eso es como… MUY FUERTE.
¿Una mujer que te inspire?
Mi mamá, siempre. Pero mi tía abuela, Judith, que apareció en el principio de la película, ella es, bueno fue, una fuente de inspiración en mi vida. Luego hay muchas mujeres artistas, amigas. No tengo un referente específico.
¿Hay algo que compartan en común las mujeres que admiras?
Quizá cierta fuerza, cierta valentía, decisión, independencia. Posición no de ser victima de algo y de ir hacia donde uno quiere. Mujeres que pueden no saber lo que quieren pero trabajan para eso, van buscando. Eso me inspira… La vida, la búsqueda.
¿Qué es lo más difícil de ser mujer?
¿Qué es lo más difícil de ser mujer? No sé, la verdad (risitas). No sé si crea que hay algo que me resulte difícil al ser mujer. No. No pienso en esos términos. Creo que hay cosas que cuestan sea hombre o mujer. Lo voy a pensar igual.
¿Crees que el sistema nos tiene miedo?
Creo que el sistema le tiene miedo a cualquier fuerza que se oponga a las reglas. Cualquier forma de organización que cuestione los limites. Miedo a todo lo que pueda desestabilizar las reglas que imperan. No creo que a las mujeres en particular. Las mujeres quizá sí tengan una fuerza que asusta (risas).
¿Qué es lo más transgresor que has hecho?
El ser mamá es un punto que divide mi vida y hacer esta película. Ha sido un punto importante en mi historia personal, que ha tenido cierta trascendencia. Confianza, entender que lo que yo hago tiene valor.
¿Te sientes bella Julia?
Sí, sí (risitas). Me siento bella. Igual bella no en el sentido estético. Me siento cómoda con mi cuerpo, historia. Como Aterciopelados “me amo a cuerpo entero”. No soy una persona conflictuada conmigo, no me rechazo a mí misma.
¿Qué te ha ayudado a construir el amor propio?
Yo creo que tiene que ver la forma como uno ha sido criado. Creo que mi familia ha sido muy contenedora. Me ha permitido crecer en libertad y enseñado ciertos valores para hacer las cosas. La crianza es fundamental para sentirse bien con uno mismo. Si se le enseña a uno con amor o violencia. Mi caso es positivo, mi entorno fue enriquecedor. Si bien hay cosas fuertes e importantes siempre rodeada de mucho afecto. Haber sentido el cuidado y amor del otro.
¿Qué te molesta?
Muchas cosas (risas). Muchas cosas. Pero así muy importante que me enoje, la soberbia. La gente muy avara. La injusticia en general, pero eso lo dice cualquiera. Más que me enojen, me entristecen una mierda. Lo que sucede en el mundo, tanto las personas como el planeta. El poco cuidado, no prestar atención, el poco amor.
¿Cómo aportas tu granito de arena?
Creo que haciendo cine es una forma. Tal vez difundiendo cine, también dibujo. Son cosas que van sembrando. En mi barrio también, creando espacios de encuentro para transformar lo que no nos gusta.
¿Crees que las mujeres debemos apropiarnos de nuestro rol?
Sí, totalmente. Apropiarnos y aceptarnos. Hay toda una exigencia de cómo deberíamos ser o actuar; y en realidad criticamos a las amas de casa o a las profesionales que laburan y laburan y no tienen tiempo para sus hijos y al final de cuentas hay que dar el espacio para que cada una encuentre su lugar. Cuando uno es genuino con lo que desea, es que puede hacer las cosas verdaderamente. Si uno está cómodo siendo ama de casa, por qué debería uno aspirar a lo que otras mujeres exigen. Ocupar el lugar que se quiere, y dar batalla desde ahí. El lugar desde donde eres feliz. Sino pasaría lo mismo de antes, mujeres volcadas a la casa, o ahora a lo profesional. No es una cosa ni la otra.
¿Tienes un lado oscuro?
Sí, pero no sé. Quizá es muy intimo. De pronto relacionado a la tristeza. Todos tenemos nuestra parte dañada (risitas).
¿Qué le dirías a la Julia de hace 10 años?
Le diría… Sobretodo que tenga confianza. Es fundamental para hacer lo que uno hace. Para ser lo que vos sos. Que confíe en lo que es.
_
Una canción La pastorcita, Violeta Parra
Un libro Las escenas vacías, Gloria Peirano
Un apodo que odiaste Peche
¿Qué es la sexualidad? Libertad
¿El pudor? ¿Qué pienso acerca del pudor?
¿El aborto? Cada quién
¿La seguridad? En uno mismo
¿La felicidad? Completo
¿La religión? Ninguna
¿La política? Necesaria
Un sabor Mango
Una frase No me gusta dar frases
Una parte del cuerpo Cuello, los hombros
¿Que te enamora? La dulzura
//
Gracias Julia por escaparte a esas escaleras a contarnos tu historia.
@MyGrlstory